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La contradicción de María de Zayas

María de Zayas, como símbolo de feminismo en España de la Modernidad Temprana, presenta una opinión bastante nueva en aquella época. Pero de algunas maneras, ella también representa una contradicción que nos muestra que el feminismo no era completamente establecido. Eso es un tema muy común dentro del contexto de España de la Modernidad Temprana, como podemos ver en la serie de Radio Televisión Española Isabel.

En el prólogo de sus novelas “Al que leyere,” Zayas habla a sus lectores, quiénes son claramente intelectuales y probablemente hombres. Ella habla sobre los derechos y percepciones de mujeres y defiende a las mujeres históricas que tuvieron un impacto grande a la intelectualidad e historia. En un lado, ella presenta una idea completamente opuesta a las de Fray Luis de Leoón cuando habla de las mujeres poderosas que no simplemente se quedan en casa, sino que contribuyen al mundo académico. Mientras Fray Luis se enfoca en las mujeres intelectuales que dedican sus vidas a Dios, Zayas quiere insistir en que las mujeres tengan tal capacidad de contribuir a la sociedad como hombres -- y más, que las mujeres ya han contribuido mucho y no es nada nuevo. Ella dice, “¿Qué razón hay para que no tengamos promptitud para los libros?” (línea 38-39). Esta cita es en el contexto de su explicación de las mujeres como la hermana de Pitágoras, quienes ayudaban a los éxitos de sus colegas masculinos pero nunca recibieron su propio crédito.

Pero al final de su prólogo, Zayas presenta una opinión en conflicto con sus primeras opiniones. En la línea 45, ella dice que si algo es hecho de una mujer y es bueno, debes aceptarlo como bueno, pero, “si es malo, por la parte de la cortesía que se le debe a cualquiera mujer, le tendrás respeto” (líneas 45-47). Mujeres en nuestro generación quieren ser considerado como iguales con los hombres. Aunque esto es parte del argumento de Zayas en el principio del prólogo, este ejemplo es muy diferente. En esta cita, ella pide para el tratamiento especial de las mujeres. Parece que ella quería respeto para las mujeres en todas ocasiones -- y también cuando no necesariamente lo merecen. Esto parece un gran contradicción de Zayas porque presentaba una idea bastante feminista en el principio del artículo, pero esta idea es exactamente el opuesto porque feministas hoy quieren luchar por los derechos y el respeto, no simplemente quieren que los hombres les darlo.

Un otro ejemplo de la dicotomía del feminismo de Zayas es dentro de su texto “El Jardín Engañoso.” Aunque hay ejemplos de la libertad de las protagonistas femeninas de escoger cualquier compañero que quieran, también hay un ejemplo de la debilidad de mujeres porque Constanza no demanda respeto de Carlos y no le importa cuando él minte sobre su enfermedad. Actualmente, ella dice “gracias” a Carlos por mentir. Parece como ella no está tan fuerte para demandar honestidad de su marido.

En mi opinión, la dicotomía del feminismo de Zayas resulta del siglo medieval. Aunque sí, ella presenta una idea más avanzada que la sociedad en que vivía, la idea de feminismo todavía no está muy desarrollada. Si estos textos fueron escritos en nuestra edad, sean muy diferentes. Pero del mismo modo, no realmente puedo ser bastante crítica de los textos de Zayas porque empezó la idea del feminismo en un siglo en que no había empezado antes.

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